Si has llegado hasta aquí seguramente te estés preguntando qué cepillo comprar: eléctrico o manual.
¿Eléctrico o manual?
Nuestro dentista en Valladolid va a intentar ayudarte al respecto, pero te avisamos ya: no existe una regla universal para la mayoría de la gente. Sólo en estos casos hay una solución clara y univoca:
- Si tienes problemas gingivales diagnosticados o notas que sangras al cepillarte: usa cepillo manual y en ningún caso eléctrico, ya que el movimiento rotatorio del cepillo eléctrico puede producirte retracción de la encía (pérdida de la encía). Si te encuentras en este caso también es recomendable que acudas a tu dentista lo antes posible.
- Si el usuario va a ser un niño menor de 8 años: cepillo manual. Los niños es importante que usen el cepillo manual ya que durante los primeros años deben aprender a cepillarse. Seguramente, cepillarse con uno eléctrico les resulte más divertido, pero tienes que pensar en enseñar a tu hijo un correcto hábito de cepillado.
- Si el usuario tiene alguna discapacidad funcional que le permita realizar de manera constante el cepillado o bien sufre dolores en las articulaciones: el cepillo eléctrico facilitará que pueda eliminar la placa con un menor esfuerzo.
En el resto de casos, algunos cepillos eléctricos son mejores que el manual, si bien ambos tienen ventajas e inconvenientes, como:
- El cepillo eléctrico, según han demostrado varios estudios, resulta más efectivo para eliminar la placa bacteriana. En especial, lo más efectivos son aquellos que tiene movimientos rotatorios en ambas direcciones.
- Algunos cepillos eléctricos tienen temporizador, de forma que indican al usuario el tiempo mínimo cepillado e incluso cuando deben pasar de cuadrantes.
- Los cepillos eléctricos obligan a realizar menor presión sobre los dientes, haciendo que se produzca menor riesgo de abrasión del esmalte dental.
- En algunos casos, los cepillos eléctricos disponen de un indicador de presión que nos alerta en el caso de estar apretando demasiado. Los cepillos con este tipo de alertas, son especialmente útiles para quienes aprietan en exceso.
- Con el cepillo manual, la dirección del cepillado tiene que ser vertical, mientras que con el cepillo eléctrico el movimiento rotativo del cabezal facilita las cosas.
- El cepillo manual suele tener más variedades de durezas de las cerdas, lo cual permitirá elegir el que más se ajuste a tus necesidades. No obstante recuerda, que en contra de lo que se piensa, es más efectivo un cepillo de cerdas suaves.
- El cepillo manual dispone en muchos mas casos de un limpiador lingual, logrando una mejor higiene de esta parte.
- En cualquier caso, tanto si compras un cepillo eléctrico como manual recuerda: cambia el cepillo cada 3 meses de utilización y elige siempre uno con varios tipos de cerdas. Y en el caso de haberte decantado por un cepillo eléctrico, verifica que disponga de la aprobación de alguna de las asociaciones dentales o del Colegio de Odontólogos.
Pero recuerda, que ni con el mejor cepillo del mundo vas a conseguir sin concienciación tener una correcta salud dental. Sólo con constancia, cepillándote de forma correcta lo vas a poder lograr y usando seda dental. Lo lograrás.